Las finales se ganan y no se juegan y el Manchster City venció la de la Capital One Cup ante el Sunderland. El 3-1 final ni se discute ni se discutirá. Del cómo y las formas quedan más dudas. Porque el equipo de Poyet fue mejor durante la primera mitad y solo dos destellos aislados de los citizens en dos minutos permitieron a Pellegrini encarrilar la victoria y levantar su primer título en Inglaterra. La diferencia estuvo más en los millones, en el nivel de una y otra plantilla, que en el juego.
El Sunderland tenía el partido donde lo quería Poyet. Regaló el balón a Pellegrini, se encerró atrás y buscó un segundo gol al contragolpe aprovechando la debilidad defensiva rival y la velocidad de Borini y Jonhson. El City tenía el balón pero le faltaban ideas y espacios para saber qué hacer con él. Así, en el 37, en un calco de la jugada del 1-0 Borini tuvo la sentencia tras ganar las espalda a los centrales y plantarse solo ante Mannone. Esta vez, no obstante, Kompany llegó a tiempo para redimir su fallo previo y mantener con vida a su equipo. El descanso no mejoró el juego de City pero tampoco lo necesitó.Durante los primeros 45 minutos no se supo quién era el City y quién el Sunderland, quién el candidato al título de la Premier y quién el que pelea por el descenso. Ki recordaba al mejor Toure, Adam Johnson fue un puñal mucho más dañino que el dúo Silva-Nasri; y Borini se pareció más a Agüero que el propio Kun. A ese intercambio de roles se unió la ausencia de Negredo, extraña, y el fallo de rigor de la defensa citizen, que sigue sin estar a la altura de un equipo aspirante a títulos. Lo raro es que esta ve no fue Demichelis, ni siquiera Lescott (suplente), sino Kompany, el único que nunca suele errar. Johnson mandó un balón a su espada y Borini venció al belga en velocidad, inteligencia y potencia para quedarse solo ante Pantilimon y hacer el 0-1 con una definición digna de futbolista grande.
A falta de fútbol apareció el talento. Primero de Yaya Toure, que en un disparo desde fuera del área cambió el sino del partido. Podría pensarse que reventó la red con un misil aprovechando su descomunal potencia pero no. Sacó a relucir su lado más romántico, con un chut que pareció más una caricia que un disparo. Nasri hizo la réplica a la siguiente jugada. El Kun abrió para Kolarov y el centró del serbio encontró en el exterior de la bota del francés el 2-1. El Sunderland intentó la reacción pero Pellegrini la cortó por lo sano.
Empezó el partido con dos delanteros y dos mediapuntas y lo acabó con trivote (Javi García, Toure, Fernandinho) y un solo delantero. Así freno los arrones de los black cats e incluso al final, al contragolpe, encontró un tercer gol de Jesús Navas que le sirve para lograr su primer título en el fútbol inglés y superar la temporada pasada de Mancini, que no ganó nada. Eso sí, para vencer la Premier League necesitará algo más.
domingo, 2 de marzo de 2014
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