Una joven promesa de 18 años quiso robarle a Ryan Giggs el día de su homenaje en Old Trafford. El galés decía adiós la grada con 40 años y cerca de 1000 partidos (24 temporadas) como jugador, aunque por las circunstancias lo haya hecho también como entrenador. Pero James Wilson, debutante con elManchester United en la Premier League, quiso irrumpir en su estreno como deben hacerlo los que quieren quedarse.
El once de los locales ante el Hull City estaba repleto de suplentes y no habituales. Sentados Ferdinand yRooney, entre otros como Vidic (otro clásico que cambia de aires), Giggs quiso dar la oportunidad a los que menos han contado y la idea no salió del todo mal. Wilson marcó tras recoger en el área pequeña un cabezazo de Fellaini en el 31' y al rematar a la red un despeje del meta Jakupovic (61'). El Hull no se jugaba nada y no llegó a inquietar en ninguna fase del partido.
La grada despidió al novato en pie y con aplausos cuando fue sustituido, tal como hizo con el entrenador una vez saltó al campo a jugar sus últimos minutos en casa. Fueron suficientes para asistir a Van Persie en el tercer tanto de los 'red devils' y para recibir una sonora ovación cuando el árbitro señaló el final. Antes había acortado diferencias Fryatt con un zapatazo desde fuera del área ante el que poco pudo hacer De Gea.
martes, 6 de mayo de 2014
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