Portugal casi dice adiós a Brasil tras dejarse remontar en la segunda parte un partido que iba ganando en el minuto 5. Un mal centro al área de Veloso. Un pésimo despeje de un defensa estadounidense. Y la secuencia acaba con el balón en los pies de Nani para fusilar a Tim Howard y adelantar a Portugal en el marcador. El encuentro no podía comenzar mejor para Portugal.
La tranquilidad de ese tanto hizo que los hombres de Paulo Bento se echaran atrás y cedieran la posesión del balón a Estados Unidos. Los pupilos de Klinsmann, liderados por Johnson, que encontró continuas vías de agua por la banda derecha, empezaron cercar la portería de Beto. El meta tuvo que hacer cuatro intervenciones de mucho mérito. Sin embargo, la falta de puntería norteamericana y el acierto del por tero sevillista dieron confi anza a Portugal. En el minuto 44, la selección ibérica tuvo una doble ocasión para hacer el 2-0. El balón le llegó de nuevo a Nani y soltó un zapatazo que fue neutralizado entre Howard y el poste. El rechace le cayó a Eder y su remate fue de nuevo despejado de forma acrobática por el meta americano.
En el descanso, Paulo Bento hizo un cambio para tratar de frenar a Johnson. Sentó a André Almeida para meter a William Car valho y recolocar a Veloso en el lateral izquierdo. Sin embargo, el extremo siguió haciendo de las suyas. En el minuto 54 se fue en velocidad y puso un centro medido para Bradley. El gol se cantó en medio mundo, pero Ricardo Costa apareció en plan héroe portugués para evitarlo sobre la línea.
El que no falló fue Jones nueve minutos después. El centrocampista se sacó un espectacular disparo desde fuera del área para hacer el empate. El partido ya estaba loco y en ese ritmo vertiginoso llegó el tanto de Dempsey, que eliminaba a Portugal, pero Varela hizo el empate en el último segundo y da vida a Portugal.
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