El Chelsea volvió a ofrecer malas vibraciones y salvó los muebles en el descuento ante el modesto Wigan, que había ganado los dos últimos partidos, gracias a un gol de Mata. El equipo de Di Matteo, sin embargo, sufrió lo indecible para poder seguir aspirando a los puestos de Champions League. El equipo de Di Matteo dominó durante la primera parte pero sin superar Al Habsi, auténtico héroe en el cuadro de Roberto Martínez, especialmente en una parada a cabezazo de Drogba. Tras el descanso, Di Matteo dio entrada a Fernando Torres y poco después el Chelsea abrió el marcador, en gol de Ivanovic en fuera de juego claro tras pase de Raúl Meireles. De nada le sirvieron al Wigan sus protestas. Sin embargo, a ocho minutos del final, un zurdazo del exrayista Diamé ante el que hizo la estatua Cech equilibró el marcador.
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