Mourinho quiere más fútbol para su centro del campo pensando ya en la próxima temporada. Está muy contento con su tridente de ataque (118 goles entre Cristiano, Higuaín y Benzema), pero considera que la zona de creación está muy supeditada a los altibajos de Özil. Con Kaká, ya poco o nada puede esperar. De hecho, en el club muchos creen que el brasileño terminará traspasado al PSG. Por eso, Mourinho está sondeando el mercado y un jugador brilla con luz propia para cumplir esa misión: David Silva. De hecho, en el entorno de Silva se produjo hace unos días una llamada de una persona que en nombre del Madrid les preguntó si el chaval estaría en disposición de afrontar una negociación entre los dos clubes para intentar su fichaje. No hay que olvidar que las relaciones institucionales entre Real Madrid y Manchester City son magníficas, hasta el punto de que el club blanco se enteró el año pasado antes que el propio Atlético de la decisión definitiva del Kun Agüero de aceptar la propuesta del actual campeón de la Premier.
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