El 6 de julio de 2009 comenzó a escribirse la historia moderna del Real Madrid. Ese día, hace hoy tres años, Cristiano Ronaldo fue presentado como nuevo jugador del conjunto blanco, del que ya es goleador legendario. En cuanto a promedios, no hay discusión. Suma ya 147 goles en 144 partidos oficiales, 1'02 por encuentro. Más de doble (0'40) de los que acreditó durante sus seis temporadas en el United. Como 'red devil' logró su primera Bota de Oro, en 2008, con un registro de 43 goles, 31 de ellos en la Premier League. En Liga, ha superado esas cifras en dos de sus tres cursos en Madrid: 41 goles la pasada temporada -superando el histórico récord goleador de Telmo Zarra y Hugo Sánchez-, pasaporte hacia su segunda Bota de Oro, y 46 en la 2011-12. Un registro que, esta vez, no le ha valido para reeditar el Pichichi de 2011, que este año le arrebató Leo Messi. Pero los goles de Cristiano sí sirvieron para impulsar al Madrid a la conquista del título de Liga, tras tres años de dominio absoluto del Barcelona. El proceso de maduración del portugués ha permitido ver su versión más completa: sin perder ni un ápice de su descomunal potencia de fuego -60 goles-, Cristiano se ha implicado más que antaño en ayudas defensivas y, sobre todo, se ha destapado como un notable asistente. Hasta una docena de pases de gol llevaron su firma.
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