El fútbol uruguayo atraviesa una crisis debido a la violencia de los grupos ultras en los encuentros y diferencias entre los dirigentes de los clubes por los derechos de televisión del deporte y, especialmente, de la selección.
El pleno del Comité Ejecutivo de la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF) presentó su dimisión el lunes después de que el Gobierno anunciara que no habría custodia policial en dos de los principales estadios debido a la violencia, lo que llevó a que los futbolistas decidieran suspender los partidos.
"¿Ustedes piensan que Uruguay va a ser sancionado? No, Uruguay va a jugar el Mundial y va a estar en su grupo. El problema del fútbol uruguayo ya está resuelto", dijo Blatter al ser interrogado sobre el tema durante una conferencia de prensa en Costa Rica.
Uruguay forma parte del Grupo D del Mundial, que se jugará del 12 de junio al 13 de julio, y se medirá con Costa Rica, Italia e Inglaterra. La celeste debutará el 14 de junio ante Costa Rica, el 19 se medirá con Inglaterra y cinco días después cerrará su participación en la fase de grupos ante Italia.
A pesar de que el presidente uruguayo, José Mujica, dio marcha atrás en su decisión sobre la vigilancia en los estadios, la disputa de los partidos no ha vuelto a la normalidad aún. El miércoles, la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol) sancionó a la AUF suspendiendo temporalmente y por tiempo indefinido su participación en el organismo.
No hay comentarios :
Publicar un comentario