México goleó a Croacia y se clasificó como segunda de grupo para los octavos de final, en los que se enfrentará a Holanda.
Croacia tenía más necesidad y por eso presentó más prisas. Desde el primer minuto presionó la salida de balón de México, aunque con más intención que efectividad.
Lo más sonado que hizo México en el primer cuarto de hora fue el cabezazo de Rafa Márquez a Modric en el 10'. Fue sin querer, así lo pareció, pero el coscorrón dejó al croata unos minutos en el suelo.
Tenía Croacia a México en su área castigado y sin salir, pero es conocido que cuando de verdad da miedo México es cuando se estira. Así llegó el peligro. Primero un remate defectuoso de Guardado y después un zurdazo de Herrera a la cruceta. Estuvo a punto de ser 'el gol del Mundial'.
Al descanso, México estaba clasificado para octavos de final y la afición mexicana comenzó a hacer la ola en el Arena Pernambuco. Es suya. Ellos la inventaron en su Mundial de 1986.
Modric estuvo más activo defendiendo que en tareas ofensivas y el tiempo pasaba en contra de Croacia. El mediocentro del Madrid subió su posición y pidió el balón, pero volvió a suceder lo mismo que ocurrió antes: El balón para Croacia y las ocasiones para México. Un remate de cabeza de Peralta, un centro cerrado que Corluka sacó bajo palos y un penalti no pitado por manos de Srna a remate de Guardado. Y los goles. De Márquez, de Guardado y de Chicharito. Croacia, otra selección europea para casa, fue despedida con el conocido "Ay, ay, ay, ay, canta y no llores...". Al menos, nadie mejor que los mexicanos para cantarte el Cielito Lindo.
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